Pie de atleta

Se denomina pie de atleta a  una infección causada por un hongo  que afecta a los pies. Generalmente se localiza en los pliegues entre dedos  y en la planta del pie.

Suele identificarse porque la piel se agrieta o escama desprendiéndose de entre los dedos o los laterales del pie También puede aparecer ardor, picor o ampollas.  

Se transmite directamente de persona a persona, y también a través de objetos contaminados con el hongo, como zapatos, calcetines o toallas, superficies de la piscina o en la ducha. Por ello, conviene realizar una buena prevención como el uso de chanclas en zonas de baño públicas o duchas de gimnasio y evitar compartir toalla.

Para el tratamiento del pie de atleta, se suele usar un antimicótico por vía tópica, ya sea en polvo o en crema. El tratamiento debe continuar una o dos semanas después de la desaparición de la infección, para evitar recaidas.

El tratamiento de elección actual es Bifonazol. Una aplicación diaria en crema durante tres semanas consigue tasas de curación superiores al 90%.

RECOMENDACIONES

Se deben seguir una serie de medidas, cuya finalidad es evitar el contagio y la propagación de estos agentes infecciosos:

1. Ser cuidadoso a la hora de secarse los pies y no dejarlos mojados o húmedos, comprobando que la piel entre los dedos quede bien seca después del baño.

2. Usar chanclas en las piscinas públicas, baños y duchas del gimnasio.

Cambiarse de calcetines incluso más de una vez al día para asegurarse  que los pies estén más secos.

3.Cambiar a menudo de calzado para evitar que se mantenga húmedo y pueda ser fuente de infecciones.

4.Usar zapatos hechos con materiales que permitan una buena transpiración.

5.En personas que sean propensas a sufrir esta clase de infecciones se recomienda el uso de talcos antimicóticos o de secado para una mayor seguridad de los pies. Recomendamos Funsol Polvo para añadir dentro del zapato o calcetín o para simplemente polvorear sobre el pie descalzo.

6.Las personas con pie de atleta deben tomar precauciones para evitar que los pies toquen objetos o el suelo que luego vaya a ser tocado/pisado por otras personas para evitar el contagio